Punto y seguido.

Después de todo este tiempo, por fin me he dado cuenta de lo que necesito en mi vida. He cumplido objetivos que tenía. He trabajado, donde he conocido a mucha gente, me he reído mucho, y también he llegado reventada a casa, pero con energías para darlo todo al día siguiente. Conocí a una de las personas más importantes en mi vida, quien me ha cuidado desde el minuto 1, quien me ha aguantado en mis ratos de mal humor, abrazado en los malos momentos, superado baches conmigo, quien me ha demostrado que me quiere contra viento y marea, y quien me ha hecho crecer un poquito.
Es verdad que he dejado amigos en el camino, otros que me han sorprendido, y amigas que he ido ganando. Amigas que conociéndome desde hace poco, saben cómo estoy con verme la cara, o mi forma de hablar. Detalles, que hacen que les vayas cogiendo cariño. Dicen que el roce hace el cariño, y que la distancia hace el olvido, por desgracia creo que así es, aunque creo que muchas veces la distancia la ponemos nosotros mismos.
Otro objetivo que he cumplido ha sido seguir estudiando, muchos me decían que era mi culpa el no haber seguido, y aquí estoy, les he ido callando la boca uno por uno, no solo he conseguido hacerlo, sino que también he sabido centrar mi camino, y mirar hacia donde quiero ir. No solo depende de que tu quieras o no quieras hacer las cosas, muchas veces nos frenan los pies las circunstancias, y a mi me han ido frenando unas cuantas, pero que por suerte he superado.
Estos meses, en concreto 8, puedo decir que he crecido un poco. He cambiado, si, ya no soy la loca que hacia las cosas sin pensar, he aprendido a controlar mis impulsos, he aprendido que la vida tiene etapas y que nunca son ni tan buenas, ni tan malas. Los momentos son efímeros y por eso tienes que tener los dos pies en el suelo, y saber apreciar lo que dejas atrás, porque puede que cuando tu momento se esfume, lo que has dejado atrás también se haya esfumado. Pero también me he sentido querida, por fin he encontrado seguridad en mi misma, y que por supuesto no lo he conseguido yo sola. Al igual que ha habido gente que me ha decepcionado, me han sorprendido otros cuantos, mis padres, mis hermanas, mi sobrino que es el mejor regalo que nos pudo llegar hace casi 2 añitos, cuando me abraza y me llena de besos, o cuando me llama tía, cuando quiere que le haga cosquillas...o cuando viene a recogerme a clase la forma que tiene de saludarme, todos esos detalles son los que hacen GRANDES mi día a día. Ni caprichos, ni querer aparentar algo que no soy para que otros me quieran, ni nada de eso. Y todo este texto, me lo dedico a mi misma, que llegar hasta donde estoy ahora me ha costado lo mio ;)